Casi todo el año en San Francisco hay un clima agradable. Solo en abril y marzo hubo inconveniente. Un diluvio que perecía no acabar pero la normalidad retorno y los tolerantes e imaginativos seres de esta ciudad retomaron las calles en la ciudad, se podía ver la enorme cantidad de personas ir de un sitio a otro: Haight Ashbury, Ocean Beach, el Embarcadero, Golden Gate Park. Mezclado entre la multitud espiaba nunca terminando mi asombro y gratitud a esta afluencia de sentidos. Alegre por haber tenido ese intuitivo sentido, esa idea de venir aquí, haciendo un largo viaje de tres días por tierra desde Nueva York.
Jul. 2006.
juan carlos vásquez
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